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¿Estás pensando en cambiar las ventanas de tu casa y no sabes por dónde empezar? Nuestra recomendación siempre será que busques el asesoramiento de un profesional, pero te ofrecemos algunas pautas para que aprendas a distinguir las ventanas de calidad.
Elegir ventanas es una tarea complicada… sobre todo si no tenemos ni idea del tema. Lo primero que hay que comprender es que la ventana es, en realidad, un sistema constructivo en el que, además de la propia ventana, solemos tener la caja de persiana que, como veremos más adelante, juega un papel fundamental en el rendimiento del sistema.
En segundo lugar, debemos saber que el hueco de la ventana es uno de los puntos más débiles de la vivienda en lo referente a pérdidas de frío-calor, pero no es el único. Si, por ejemplo, cambiamos la ventana de un dormitorio, pero la pared es de baja calidad, podríamos instalar la mejor ventana del mercado y seguir teniendo problemas de aislamiento.
En tercer lugar, una buena ventana, mal instalada, pierde buena parte de su efectividad. El montaje es fundamental para maximizar su rendimiento. Confía siempre esta labor a profesionales con experiencia.
La ventana se compone de marco y hojas fijas y móviles (las puertas). Ambas partes se unen mediante herrajes, que conforman el llamado cierre perimetral.
La calidad de la ventana estará determinada por las características del perfil, la cantidad y calidad de vidrios utilizados y el número de herrajes que componen el cierre perimetral.
Aunque en España sigue siendo demandado el aluminio, en el resto de Europa (donde soportan un clima más frío) el PVC es la opción más utilizada por sus excelentes prestaciones.
Las ventanas de PVC son más baratas, son 1400 veces más aislantes que el aluminio, son 100% ecológicas y tienen una larga vida útil (hasta 50 años).
En este artículo encontrarás más información sobre las ventanas de PVC frente a las ventanas de aluminio.
Si cortamos de forma transversal el marco de la ventana, veremos sus diferentes componentes. Las ventanas de PVC son, hoy en día, un elemento constructivo altamente innovador, en el que utiliza tecnología de vanguardia para lograr altas cuotas de aislamiento tanto térmico como acústico.
La medida en milímetros (mm) nos da una primera idea de la calidad del perfil de la ventana. Cuantos más mm, más calidad. Cuanto más ancho es un perfil, mayor número de cámaras interiores de aire y puntos de cierre y, por tanto, mayor estanqueidad.
La ventana de PVC estándar se construye con dos vidrios y una cámara de aire o gas argón intermedia (el gas aumenta la efectividad aislante de la ventana).
Esta ventana estándar, con sus dos vidrios, es más que suficiente para garantizar un óptimo aislamiento térmico y acústico en nuestro clima templado y en zonas no especialmente ruidosas.
En puntos más fríos (en altitud, zonas muy expuestas…) o en zonas muy ruidosas (junto a fábricas, zona de bares o comercial…), es interesante añadir un tercer vidrio, que atenuará el impacto del frío-calor y la contaminación acústica. Además, el tercer vidrio añade seguridad al conjunto, al robustecer la ventana.
Ventana de PVC de triple vidrio
El tipo de vidrio utilizado en la construcción de la ventana es también importante. El vidrio bajo emisivo aumenta el confort al controlar el frio-calor que se transmite entre el interior y el exterior de la vivienda.
Más información sobre el uso de vidrio en la ventana de PVC
Otro de los elementos clave de la ventana de PVC es el cierre perimetral, el conjunto de herrajes o puntos de cierre que sellan la ventana a lo largo de su superficie.
Cuantos más cierres, mejor se reparte la presión que ejerce el viento sobre la ventana, lo que contribuye a un mejor rendimiento y durabilidad. Además, un buen cierre perimetral hace más difícil forzar la ventana desde el exterior.
La ventana de PVC estándar suele contar con 5 puntos de cierre. Si queremos reforzarla, pueden ampliarse hasta 8.
La caja de la persiana es un elemento crítico en la ventana de PVC. Hay que tener en cuenta que la caja de la persiana supone un punto flaco del sistema, ya que comunica el exterior e interior por el hueco de la cinta.
Hoy en día existen modelos de caja de persiana con aislamiento reforzado, aunque el cierre 100% es imposible. Por ello, es recomendable instalar una persiana domotizada, controlada por interruptor o mando a distancia. De esta forma, eliminamos el hueco que comunica con el exterior.
O mejor: si es posible elige ventanas sin persiana y opta por instalar contraventanas exteriores o interiores, o cortinas o estores opacos.
La mejor ventana del mundo, mal instalada, pierde su efectividad y reduce su vida útil.
Las ventanas debe instalarlas un equipo profesional. Bien niveladas, plomadas y ajustadas, resultan 100% efectivas y se garantiza una larga vida útil.
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